La farmacia debe convertirse en un centro de salud más
La actitud de los boticarios debe ser proactiva, para adelantarse a las nuevas necesidades que puedan tener los pacientes El futuro de la farmacia pasa porque el usuario la perciba como un centro de salud más. Así se expuso el jueves 21 en la mesa de debate «Farmacia y paciente´´ durante el XVII Congreso Nacional Farmacéutico. A las características ya por todos conocidas y asumidas de ser un servicio accesible a todo el mundo y en todo momento, y de gran calidad, se suma la confianza que los pacientes, que cada vez más responden al perfil de crónicos y polimedicamentados, tienen en su farmacéutico, por lo que no puede dejar que la botica se convierta en un mero negocio mercantil.
Los profesionales de la farmacia deben identificar qué lagunas existen en las necesidades de los pacientes para cubrirlas no con suposiciones, sino con datos reales. Su actitud debe ser cada vez más proactiva: tienen que anticiparse a lo que el paciente pueda demandar. Para eso, es necesario un trabajo muy directo entre las oficinas de farmacias y los colegios de farmacéuticos, así como de las instituciones, como ha ocurrido en el País Vasco con la Asociación de Celíacos, que han encontrado en los farmacéuticos uno de sus principales aliados.
