La receta electrónica marcha a velocidades distintas
La crisis ha provocado que algunas regiones hayan dado un parón a su implantación.
La UE solicitó a los Estados miembros asumir el compromiso de desarrollar la sanidad electrónica y, de este modo, aumentar la calidad de la asistencia sanitaria, facilitar la accesibilidad y hacerla más segura. Asimismo, incidió en llevar a cabo un análisis cuidadoso y coordinado de los obstáculos que dificultan su implantación. Dos recomendaciones, que hizo suyas el Consejo Interterritorial, que fueron abordadas recientemente en la I Jornada de Receta Electrónica que organizó en Palma de Mallorca la Consejería de Salud de Islas Baleares.
El encuentro, inaugurado por el consejero balear de Salud, Vicenç Thomas, y que contó con la presencia del director general de Farmacia del Ministerio de Sanidad, Alfonso Jiménez, así como de responsables de 15 sistemas sanitarios autonómicos, abordó los retos y oportunidades que ofrece la e-receta, las fortalezas y debilidades de este sistema, la interoperabilidad de la misma, así como las posibilidades futuras. ¿Cuál fue una de las conclusiones del encuentro? En España hay dos velocidades cuando se habla de e-receta.
En este sentido, la directora general de Farmacia de Islas Baleares, Rosa María Alis, consideró que si bien es cierto que existe esa doble velocidad, «en la cabeza de todos está su implantación, aunque los problemas económicos han hecho parar a muchas comunidades´´. Eso sí, para Alis es importante que «cada uno vaya a su ritmo, no se puede ahogar a nadie, porque sabemos que todos llegaremos, de una manera u otra, porque marca un punto de inflexión como herramienta para mejorar la prescripción y el uso racional del medicamento´´.
¿Es la interoperabilidad un problema? Según se precisó durante estas jornadas, en la actualidad no lo es. «De momento no es un problema, porque no todas las comunidades tienen implantado el sistema, pero ahora es el momento de trabajar en ello, para que no se convierta en un problema en el futuro´´, indicó Alis. Por ese motivo, resaltó la importancia de estas jornadas, «que deberían celebrarse periódicamente para potenciar las sinergias de los distintos servicios de salud autonómicos´´.
Por otro lado, otra de las conclusiones a las que se llegó durante esta jornada fue la necesidad de que el paciente entienda la nueva filosofía que lleva aparejada el nuevo sistema. «Tenemos que transmitir tranquilidad y hacerle saber que no va a tener problemas para conseguir su medicación´´, precisó. Y es que, según afirmó Alis, la receta electrónica presenta «muchas más posibilidades de las que ahora estamos viendo´´.
A día de hoy
En este sentido, según un informe de la situación de la e-receta en las distintas comunidades autónomas a fecha del mes de abril al que ha tenido acceso EG, hay comunidades, como Andalucía, Baleares, Canarias, Cataluña, Extremadura y Galicia que encabezan la puesta en marcha de un sistema electrónico que ya han implantado.
Así, Andalucía alcanzó en febrero una cobertura del 99,9 por ciento de la población. En Baleares toda la red de Atención Primaria y las oficinas de farmacia la tienen implantada al cien por cien desde mayo de 2009. En Canarias, en el pasado mes de febrero la e-receta alcanzaba el 70 por ciento de las prescripciones. En Cataluña el 73 por ciento de los médicos prescribe electrónicamente y el cien por cien de las farmacias dispensa por este sistema. En Extremadura está implantada desde mayo de 2009. En Galicia, en enero de 2011 estaba presente en el 92 por ciento de los centros de salud y en el 99,5 por ciento de las oficinas de farmacia.
En el extremo contrario de la balanza se encuentran autonomías como Castilla-La Mancha, Castilla y León, Madrid, Murcia, País Vasco, Aragón o La Rioja, todas ellas comunidades en la que la receta electrónica está lejos de ser una realidad inmediata.
A este respecto, Castilla-La Mancha se prevé la implantación total en 2012. En Castilla y León está todavía en pilotaje. En Madrid, el retraso en la implantación de un nuevo sistema informático en AP impide el lanzamiento de la e-receta. Murcia es una región en la que solamente se encuentra el proyecto recogido en el Plan de Acción para la Mejora en el Uso de los Medicamentos 2009-2011. En País Vasco, la consejería de Sanidad anunció su implantación definitiva a lo largo de 2012. En Aragón se inició en marzo la implantación. La Rioja, en 2009 se firmó un acuerdo entre el COF de la región y la consejería de Salud para implantarla pero donde todavía se trabaja en una base de prescripción única que dará paso a la e-receta.
En tierra de nadie se encuentran una serie de comunidades autónomas, como Cantabria, donde se inició la fase de implantación en mayo de 2009 y se prevé concluir la misma a lo largo de este año; Navarra, donde en mayo de 2010 arrancó el piloto y, al igual que el caso anterior, está prevista su implantación definitiva en 2011; la Comunidad Valenciana, en la que su sistema de receta electrónica está en la última fase de implantación; o Asturias, comunidad en la que se inició el proyecto de implantación en julio de 2010.
